¿Qué le pasó a la chica que se quedó dormida en la playa?

Aunque le quedaban retos por delante, Emily estaba agradecida por esta segunda oportunidad. Su confianza en el mundo que la rodeaba se había visto sacudida, pero no rota. Cada nuevo amanecer sería un regalo que no daría por sentado. Mientras tuviera el amor de su familia, podría hacer frente a todo lo que la vida le deparara, incluso a una alergia al sol.