Un ex perro policía ladra al ataúd de su antiguo dueño y revela el secreto que se llevó a la tumba

Durante esas dos semanas, disfrutaron juntos de momentos increíbles. Nadaban en el lago cercano y salían a pescar en medio de él con la barca de su padre. Por las noches, encendían la barbacoa y asaban el pescado recién pescado del día. Fue realmente uno de los mejores veranos de Jason. Sentía que no podía ser más feliz. Pero la última noche, las cosas empeoraron.

La mente de Jason vagó de vuelta a aquella fatídica noche y, abrumado por la vergüenza, cerró los ojos con fuerza. Aquella noche lo había cambiado todo, había cambiado para siempre el rumbo de su vida y la de su padre. Oh, cómo hubiera deseado poder rebobinar el tiempo, si tan sólo hubiera sabido entonces lo que… De repente, su hilo de pensamiento se rompió por la aguda llamada de su nombre, «¡Jason! ¡Jason!» La voz de Susan atravesó su ensueño, sus manos sacudieron con urgencia sus hombros, buscando desesperadamente su atención.