Sus amigos le habían advertido sobre las selvas de Bali, y sus advertencias estaban llenas de una sensación de presentimiento. Hablaban de que la jungla no era sólo una zona verde y exuberante, sino un lugar envuelto en misterio y peligro.
La describían como un laberinto denso y confuso en el que las sombras parecían moverse solas y el aire estaba cargado de amenazas invisibles. Sus relatos describían la jungla como un lugar donde acechaban peligros ocultos y donde uno podía perderse fácilmente o encontrarse con problemas inesperados.