Aunque a Heather no le preocupaba el aspecto de Jackie, con las otras madres era otra historia. Una tarde soleada en el parque, mientras observaba a su hijo Daniel mezclarse con otros niños, se encontró en una situación inevitable. Katherine, el tipo de mujer que Heather normalmente intentaba evitar por su afición a los cotilleos y la negatividad, se acercó y se sentó justo a su lado.
Esta vez Heather no tuvo escapatoria. Cuando Katherine empezó a hablar, Heather deseó haberse marchado en cuanto se sentó a su lado. Pero no lo había hecho. Y ahora, las palabras que salieron de la boca de Katherine aquella mañana se aferraban a Heather, dejando una huella inquietante en sus pensamientos. ¿Había estado equivocada sobre Jackie todo este tiempo?