Es difícil no hacer una doble toma cuando ves a este trabajador de Mc Donald’s. Con sus rasgos faciales sorprendentemente similares, podría confundirse fácilmente con el legendario rapero Tupac Shakur. El parecido es tan asombroso que los clientes a menudo se preguntan si acaban de entrar en una máquina del tiempo que les devuelve a los años 90.
¿Se trata de una intervención divina o de una extraordinaria coincidencia? En cualquier caso, es un recordatorio alegre de que, a veces, incluso las combinaciones menos convencionales pueden hacer que te rasques la cabeza y te rías de asombro. Si te encuentras de peregrinaje en México, asegúrate de no perder de vista a San Zuckerberg, ¿el santo patrón de las redes sociales, tal vez?