Mientras tanto, al otro lado de la calle, la reportera de las noticias locales Samantha Carter trabajaba en un reportaje sobre la vida urbana. Su cámara, que buscaba imágenes interesantes, vio a Joe tendido en la acera entre un pequeño grupo de curiosos. «¿Crees que está bien?», pregunta el cámara con voz preocupada.
Samantha, mirando por el objetivo, captó la imagen de Joe y de la multitud. Tras pensárselo un momento, se encogió de hombros. «Probablemente alguien que ha pasado una mala noche», respondió, con un tono que delataba falta de urgencia. «No nos distraigamos, tenemos una historia que cubrir»