Jason esbozó el siguiente paso al capitán, su tono resuelto. «Haz un anuncio en toda la nave para reunir a todos los pasajeros en el auditorio principal en media hora», instruyó. «Les diremos que es para un anuncio especial, algo que despierte la curiosidad de todos y los lleve a un lugar seguro sin causar pánico»
El capitán asintió, con expresión seria, mientras se dirigía a algunos miembros del personal de confianza que se encontraban cerca. Jason explicó la siguiente parte del plan: quería que difundieran un rumor discreto pero fuerte por toda la nave. Sus susurros servirían de cebo para descubrir a cualquier cómplice que aún se escondiera entre los pasajeros.