Esto no tenía sentido. Había estado sobrevolando la costa con su nuevo dron, con la esperanza de captar imágenes de la marejada y las olas. Los vientos debían de haberlo llevado tierra adentro. Pero ¿qué hacía esto aquí, en medio de estos bosques remotos?
Jonathan se acercó más. Era la mochila de un niño. La mochila parecía nueva, con un alegre estampado naranja. Uno de los bolsillos laterales estaba abierto. Le pareció ver asomar la esquina de un cuaderno o tal vez dibujos. Los latidos de su corazón se aceleraron y una sensación de inquietud se apoderó de sus entrañas. ¿Qué estaba pasando aquí?