Cada día, un perro se asoma a un desagüe pluvial: ¡descubrimiento espeluznante al abrirlo!

Al llegar a la comisaría, el corazón de Dave se hundió al ver que llevaban al pastor alemán junto a él. Su mente se llenó de confusión y frustración mientras intentaba averiguar por qué le estaban implicando en algo de lo que no sabía nada. A pesar de las injustas acusaciones, Dave decidió mantenerse firme y demostrar su inocencia.

Dave hizo lo que le dijeron, con el corazón acelerado por la ansiedad y la confusión. No entendía por qué le estaban interrogando y por qué habían traído también al perro. No tenía nada que ocultar y estaba decidido a ser sincero en sus respuestas. Esperaba que su cooperación ayudara a descubrir la verdad y a limpiar su nombre.