Por suerte, Mary recordaba exactamente dónde estaban guardados los álbumes de fotos. Suspiró aliviada: buscar a ciegas en el desván le habría llevado horas. Se abrió paso entre los montones de cajas viejas y por fin llegó al rincón donde estaban los álbumes.
Se sintió aliviada por haberlos encontrado y pensó que su trabajo había terminado. Pero no podía estar más equivocada. Al abrir el primer álbum, sintió un escalofrío. Faltaban varias fotografías de su padre.