Resultó que el propietario había sufrido un terrible accidente de coche y se había salido de la carretera para adentrarse en los pantanos. Había sobrevivido todos estos meses rebuscando comida y cobijo en la naturaleza. Los excursionistas quedaron conmocionados y asombrados por la resistencia y determinación del hombre.
Sabían que tenían que ponerlo a salvo lo antes posible.