Un crucero se topa con piratas, ¡pero lo que hace un valiente pasajero los deja a todos atónitos!

La voz de Jack retumbó por los pasillos de la nave, profiriendo amenazas y órdenes. «¡Salid o os encontraremos!», bramó con voz amenazadora. La nave parecía estremecerse bajo el peso de sus amenazas, aumentando la tensión a cada momento.

En marcado contraste con el caos que se desarrollaba en el exterior, Nathan permanecía tranquilo en la sala de control. Sus ojos no se apartaban de las pantallas de vigilancia, su mente acelerada pero concentrada. Transmitía instrucciones a su tripulación en voz baja, su voz era un ancla firme en medio de la tormenta.