Este material comparte las mismas cualidades táctiles que la tela que se encuentra en un rascador típico. En consecuencia, su gato tenderá a redirigir su tendencia a arañar hacia el poste, evitando que sus muebles sufran posibles daños, incluso aunque el poste sufra desgaste.
Más allá de las razones mencionadas, algunos gatos perciben tu exhalación hacia su cara no sólo como una irritación, sino también como un gesto agresivo, y lo último que querrías es enzarzarte en una escaramuza con tu gato.