«Bienvenido, Baby Daddy», decía el cartel. Chris caminó hacia ella y Natasha dejó caer el cartel. Durante un minuto todo quedó en silencio, demasiado. Tal vez el momento ni siquiera duró tanto, pero para Natasha fue angustioso. Entonces Chris abrió la boca.
«¿Me estás tomando el pelo? ¿En serio?», dijo Chris cuando vio lo que aparecía detrás del cartel. Oculto tras el cartel había un texto escrito en la camiseta de Natasha: «Soy el regalo que papá dejó antes de irse», decía. ¿Y debajo de la camiseta? La enorme barriga de Natasha.